EL NUEVO ORDEN MUNDIAL
"Pero nosotros esperamos con entusiasmo los cielos nuevos y la tierra nueva que él prometió, un mundo lleno de la justicia de Dios" (2 Pedro 3:13 NTV).
Según Wikipedia, la teoría de conspiración acerca del llamado "Nuevo Orden Mundial" afirma la existencia de un plan diseñado con el fin de imponer un gobierno único, colectivista, burocrático y controlado por sectores elitistas y plutocráticos a nivel mundial.
La frase "Novus Ordo Seclorum" en español se dice "Nuevo Orden Mundial”. Esta fue una distinción propia de la emancipación de las trece colonias inglesas constituyentes de los Estados Unidos en 1776, famoso lema y simbolismo que se halla en el reverso del Gran Sello de los Estados Unidos (1782) y de los billetes de dólar estadounidense.
Después de "La Gran Guerra" (Primera Guerra Mundial 1914-18), Woodrow Wilson, presidente de los Estados Unidos, usó esta frase para referirse a un nuevo período de la historia, el cual significaba cambios drásticos en las ideologías políticas y en el equilibrio de poderes. Después de la firma del Tratado de Versalles (Francia, 28 de junio de 1919), con el cual se puso fin a la Primera Guerra Mundial, nació la Sociedad de las Naciones (SDN), antecesora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En el primer siglo, los discípulos del Mesías nazareno esperaban con gran expectación la instauración repentina, gloriosa e inminente de un "Nuevo Orden Mundial" por medio del Rey de reyes, Jesús de Nazaret. Este "Nuevo Orden Mundial" instaurado por Jesucristo, suplantaría al injusto, tiránico y cruel viejo orden mundial, el imperio romano. El "Nuevo Orden Mundial" de Jesucristo que irrumpiera la historia sería un reino de justicia, prosperidad y paz.
El "Nuevo Orden Mundial" puede estar más cerca de lo que nos imaginamos, pero no será implantado por Trump, ni Putin, ni Xi Jimping, ni Soros, sino por Jesucristo. La esperanza de la Segunda Venida de Jesús ha pasado de generación en generación por veintiún siglos ya, y cada generación de discípulos han creído que serán testigos presenciales de la parusía. Jesús nos enseñó a orar "venga tú reino", la creación "gime" por su redención, Dios extiende su gracia para que todos se arrepientan y sean salvos, el Espíritu y la iglesia dicen: Ven.
-Carlos H. Suárez F.
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