AGUJEROS NEGROS

"Quien perdona gana un amigo; quien no perdona gana un enemigo" (Proverbios 17:9 TLA).

Uno de mis hobbys favoritos consiste en leer artículos y ver fotografías y vídeos acerca del universo. Y de todos los entes estelares que existen en el firmamento, hay uno que me llama poderosamente la atención, porque son verdaderos monstruos gravitacionales: los agujeros negros.

Stephen Hawking, el fallecido astrofísico británico que dedicó su vida a estudiar los agujeros negros, había dicho que "los agujeros negros son más extraños que cualquier cosa que hayan soñado los escritores de ciencia ficción". Así que, sean o no algo tan increíble que desafíen la imaginación, los agujeros negros son una realidad.

Pero ¿qué hay en el interior del agujero? Un agujero negro es un basurero cósmico, de 6.5 millardos de veces más masivo que el Sol, y se engulle las galaxias errantes, las estrellas moribundas y los planetas íngrimos, no dejando rastro de ellos en los cielos. La inmensa gravedad que hay en un agujero negro se traga todo lo que cruza el horizonte de eventos y ni siquiera la luz puede escapar de ahí.

Ahora bien, en cuanto a nuestras relaciones interpersonales, creo que todos necesitamos convertir nuestros corazones en agujeros negros, para engullir todos los agravios, insultos y humillaciones que se dan continuamente y no dejar rastro de ninguna de ellas. Perdonar es el arte más hermoso del carácter humano, pero como todo arte, requiere decisión, disciplina y práctica. El rencor te esclaviza, pero el perdón te hace libre.

-Carlos H. Suárez F.