UN HOMBRE VERAZ
“Mi boca expresará la verdad, pues mis labios detestan la mentira” (Proverbios 8:7 NVI).
Es admirable la actitud y muy inspiradora la
declaración del sabio que escribió este proverbio. Su compromiso con la verdad no
es Light, pues asegura que de su boca saldrá solamente la verdad. La verdad ha
sido la virtud distintiva de los siervos de Dios a través de la historia; todos
aquellos que han afirmado ser siervos y voceros del Dios Altísimo, se han distinguido
por una vida recta y una lengua veraz.
Por ejemplo, Juan el Bautista fue encarcelado por el rey
Herodes por decir la verdad. Este rey impío vivía con Herodías, la mujer de su
hermano Felipe, y Juan le decía abiertamente al rey: “No te es lícito tenerla”
(Mateo 14:4). Ser consecuente con la verdad le costó la vida a Juan, pues
Herodes mandó cortarle la cabeza. Juan amó la verdad más que a su libertad y a
su propia vida.
Otro magnífico ejemplo, Jesús de Nazaret, fue considerado un hombre veraz e intachable en todas sus
afirmaciones, aún por sus mismos detractores: “Y le enviaron los discípulos de
ellos con los herodianos, diciendo: Maestro, sabemos que eres amante de la
verdad, y que enseñas con verdad el camino de Dios, y que no te cuidas de
nadie, porque no miras la apariencia de los hombres” (Mateo 22:16).
El apóstol Pedro, quien conoció muy de cerca la vida de Cristo, dijo: “…el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca” (1 Pedro 2:22). Y lo mismo que afirmaron los siervos de los herodianos y Pedro acerca de Jesús, deberían opinar de nosotros nuestros amigos, familiares cercanos y también nuestros críticos.
El apóstol Pedro, quien conoció muy de cerca la vida de Cristo, dijo: “…el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca” (1 Pedro 2:22). Y lo mismo que afirmaron los siervos de los herodianos y Pedro acerca de Jesús, deberían opinar de nosotros nuestros amigos, familiares cercanos y también nuestros críticos.
-Carlos H. Suárez
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Plan de lectura de la Biblia completa en un año:
Marzo 13, 2019
Deuteronomio 5-6
Marcos 14:26-42
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