ÉPOCA DE ORO
ÉPOCA DE ORO
«Durante la vida de Salomón, los habitantes de Judá e Israel vivieron en paz y con seguridad. Desde Dan en el norte hasta Beerseba en el sur, cada familia tenía su propia casa con jardín» (1 R 4:25 NTV).
La Época de Oro de Israel corresponde a los reinados de David y Salomón, durante los cuales Dios deseaba que Israel fuera una nación modelo de justicia, paz y prosperidad para los pueblos circundantes. Salomón reinó sobre Israel durante cuarenta años, y durante su reinado el país alcanzó su apogeo. Según el relato bíblico, Salomón era soberano de todos los reinos comprendidos desde el río Éufrates hasta el país filisteo y hasta la frontera de Egipto, los cuales pagaban tributo y estaban sometidos a su autoridad mientras él vivió (1 R 4:21, DHH). Aunque la Biblia no especifica la edad de Salomón al inicio de su reinado, sí indica que amaba al Señor y seguía fielmente todos los decretos que su padre David le había enseñado.
Un día, Dios se le apareció a Salomón en un sueño y le prometió responder afirmativamente a cualquier petición que él le hiciera. Entonces, Salomón pidió al Señor que le otorgara un corazón comprensivo y compasivo para gobernar con integridad y rectitud a su pueblo. Este deseo de sabiduría agradó muchísimo al Señor, quien le concedió un corazón sabio y prudente, sin par en la historia pasada o futura. Además, le otorgó el privilegio de construir un Templo en su honor, abundante riqueza, renombre internacional, paz dentro de sus fronteras, la derrota de sus enemigos y una larga vida sobre la tierra.
Salomón ejerció una gestión gubernamental extraordinaria. Estableció a doce gobernadores regionales encargados de suministrar los víveres mensuales para la casa real. A pesar de la gran población en Judá e Israel, todos vivían satisfechos y seguros en sus hogares, disfrutando de la abundancia de alimentos y bebidas en todo el país. Salomón también fue un prolífico escritor, componiendo alrededor de tres mil proverbios y mil cinco canciones. Poseía un profundo conocimiento sobre plantas, animales, aves, reptiles y peces, del cual hablaba con autoridad. La fama de su sabiduría atrajo a embajadores de todos los reinos de la tierra para escucharle. ¡Solo el reino milenario de Jesús podrá superarlo!
La noticia relevante es que Dios te ama más que a nada en el universo y desea que seas tan sabio como, o incluso más sabio que, Salomón. Si careces de sabiduría para enfrentar los desafíos de la vida y tomar decisiones prudentes, pídela al Señor sin vacilación, porque Él te la dará generosamente y sin reproche. Así, la luz de tu sabiduría brillará en medio de la oscuridad, y la prudencia que recibas glorificará el nombre del Señor.
—Carlos Humberto Suárez Filtrín
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