VALIOSO

"Antes que yo te formara en el seno materno, te conocí, y antes que nacieras, te consagré, te puse por profeta a las naciones" (Jeremías 1:5 LBLA).

Este pasaje te enseña el valor supremo que Dios le ha otorgado a tu vida, pues fuiste conocido en su mente y consagrado en su corazón desde antes que nacieras, aún más antes de haber sido concebido en el vientre de tu madre y todavía más antes que el mundo existiese. Tú vales tanto que Dios prefirió sacrificar a su amado Hijo en tu lugar. Dios quiso vivir contigo a cualquier precio, pues como lo dijo, Keith Giles: “Estoy agradecido por un Dios que prefiere morir antes que vivir sin mí”.

Según el renombrado sitio web “Worldometers”, unos 42 millones de seres humanos fueron asesinados por medio del aborto (unos 125 mil abortos por día), convirtiendo este satánico procedimiento en la principal causa de muerte en todo el mundo en el 2019. Es decir, el aborto ha cobrado la vida de un millardo de personas aproximadamente en los últimos cincuenta años. Es increíble que el vientre materno se haya convertido en el lugar más peligroso y letal del orbe.

Asesinar a un ser humano en el vientre de su madre es la acción más injusta, cruel y canalla que se puede hacer, porque en todo el Universo el hombre es la criatura más valiosa, inteligente, bendita y consagrada desde antes de la creación, para desarrollar una agenda maravillosa en la historia de este mundo. Destazar a un niño como a un animal para respetar los derechos de la madre, o porque así lo requiere el nihilismo de la sociedad posmoderna, o porque la pseudo ciencia define al embrión como un simple conjunto de células, es ir francamente en contra de la voluntad de Dios, pues su Palabra claramente lo dice: “No matarás” (Éxodo 20:13).

Aunque apenas comienza el año 2020, un millón de peques ya fueron trincados en alguna clínica de la muerte y, en lo que me tarde en redactar esta reflexión, más de 5 mil niños serán descuartizados sin piedad. Si las madres de Beethoven, Cristiano Ronaldo, Celine Dion, Justin Bieber, Andrea Bocelli, Jack Nicholson, Tim Tebow, Juan Pablo II, entre otros, no se hubiesen sobrepuesto a la tentación de interrumpir sus embarazos, famosos que destacaron en el deporte, la música, la religión y el arte hubiesen sido eliminados. Dios formó a tu hijo en tu vientre con un propósito maravilloso, deja que Él te ayude a tenerlo, amarlo, cuidarlo y educarlo para su honra y su gloria.

-Carlos H. Suárez