LA NANO BIBLIA

"El cielo y la tierra dejarán de existir, pero mis palabras no dejarán de cumplirse" (Mateo 24:35 DHH).

Científicos israelíes, pioneros y líderes en nanotecnología (la tecnología que se dedica al diseño y manipulación de la materia a nivel atómico y molecular), han creado la Biblia más pequeña del mundo. La nanotecnología ha permitido a los científicos del Centro de Nanociencia y Nanotecnología de la Universidad de Tel Aviv, integrar los 929 capítulos de la Biblia hebrea (Tanaj) en un minúsculo chip que dos israelíes han incorporado a especiales piezas de joyería. Los científicos usaron un haz de iones para integrar las 1.2 millones de letras de la Biblia en un chip de silicio tan pequeño, que para ver la Sagrada Escritura debe usarse un microscopio profesional con un aumento de 100x.

La Biblia (Vulgata) fue el primer libro en ser impreso por Johannes Gutenberg el 23 de febrero de 1455. La Biblia hebrea (Tanaj) fue el primer libro en ser impreso con nanotecnología como una pieza de joyería. La Biblia, la Palabra escrita de Dios, siempre presente, vigente y pertinente en la historia humana. El salmista afirmó: "Los que aman tu ley disfrutan de gran bienestar, y nada los hace tropezar" (Salmos 119:165 NVI).

La Escritura es santa, sabia, pura, justa, recta, brillante, limpia, dulce, deseable y perfecta; querer desvirtuarla es "dar coces contra el aguijón", o "querer tapar el sol con un dedo", o querer "destruir la Muralla China con un mondadiente". Cada año aparecen nuevos paladines ateos y agnósticos en contra de la Biblia, pero la Biblia avanza con paso firme avergonzando y derrotando a sus detractores, así como lo hizo con Voltaire y Russell en el pasado, lo hace con Hitchens y Atkins en la actualidad.

Leer, meditar y obedecer a la Biblia es de sabios, es lo mejor que te puede pasar en la vida, porque en ella puedes conocer a la persona más bella, noble y amorosa del Universo: Jesús de Nazaret. En sus páginas conocerás lo que Él hizo en la cruz para perdonar tus pecados y llevarte de regreso al Padre.

-Carlos H. Suárez