EL "PIN PARENTAL"
"Los hijos son una herencia del Señor, los frutos del vientre son una recompensa" (Salmos 127:3 NVI).
El Ejecutivo del gobierno socialista de Pedro Sánchez en España, ha remitido a la Consejería de Educación de la Región de Murcia un requerimiento para que retire el uso del “pin parental” de los centros educativos, porque “los hijos no pertenecen a los padres”. La ministra de Educación, Isabel Celaá, subrayó que el “pin parental” vulnera el derecho de los niños a ser educados. Y la ministra de Igualdad, Irene Montero, afirmó: “Los hijos e hijas de padres y madres machistas tienen el mismo derecho a ser educados en valores igualitarios, en libertad, en feminismo, de amar a quien quieran y cuando quieran”.
El "pin parental", vigente desde el 2019, es una solicitud de autorización expresa de los padres de un alumno, para que éste pueda participar en actividades organizadas por el centro educativo, cuando tengan contenido que afecte a cuestiones morales, sexuales o de conciencia. Dichas actividades se enmarcan en el horario escolar, es decir, son obligatorias. Por eso, los que defienden el “pin” dicen que los padres tienen derecho a estar informados y poder mostrar su disconformidad razonada.
Alguien propuso que la batalla final entre Dios y el demonio será en el ámbito familiar, y específicamente, en el control de la mente de nuestros hijos. Y es que la "ideología de género", en España y otros tantos países, se ha convertido en la batalla del siglo XXI, porque ha desatado una degradación moral y espiritual global sin precedentes: incentivo financiero a los gobiernos para que legalicen el asesinato de los nonatos por medio del aborto, la desfachatez de llamar "orgullo gay" al movimiento LGBT, el incremento exponencial del transgenerismo, la aprobación del antinatural matrimonio gay, la ridiculez del lenguaje inclusivo y el pernicioso plan de educación homosexual a los niños en las escuelas.
La batalla por el control de la conciencia de tus hijos es diversa, diaria y tenaz, y se pondrá peor. Los faraones y los herodes asesinos de niños de la antigüedad, están presentes en los gobiernos socialistas en la actualidad. La familia es sagrada y los padres debemos cuidar y defender con uñas y dientes la educación moral y espiritual que reciben nuestros hijos en la escuela. La educación pública es un producto muy reciente de la modernidad, el modelo bíblico no fue así; Jesús de Nazaret y Thomas Alva Edison, dos grandes hombres en la historia fueron educados en casa.
-Carlos H. Suárez F.
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