CAZADOR CAZADO

"Y su padre y su madre le dijeron: ¿No hay mujer entre las hijas de tus hermanos, ni en todo nuestro pueblo, para que vayas tú a tomar mujer de los filisteos incircuncisos? Y Sansón respondió a su padre: Tómame ésta por mujer, porque ella me agrada" (Jueces 14:3).

La Biblia está llena de historias interesantes, pero la historia de Sansón es muy curiosa, porque este hombre nació con todas las prerrogativas para ser un verdadero campeón y, sin embargo, terminó su carrera como un nimio perdedor. Aunque nació con una estrella al lado, terminó estrellado.

Fíjense ustedes que fue el Ángel de Jehová (Jesús pre encarnado) quien le dio la noticia a su madre que, por milagro de Dios, concebiría un hijo varón, pues ella era estéril y nunca había podido tener hijos. En segundo lugar sería un nazareo (consagrado a Dios) desde su nacimiento. Con mucha gratitud a Dios sus padres al nacer, no hallando un mejor nombre que ponerle, le llamaron Sansón (que significa _radiante, poderoso, el que sirve a Elohim_). Finalmente, la agenda de Dios para Sansón era gloriosa: ¡Liberar al pueblo de Israel del asedio de los filisteos!

Pero Sansón en vez de enfocarse en cumplir y obedecer con el plan de Dios para su vida, empezó a escuchar y a darle gusto a los perniciosos consejos de su corazón: Se enamoró de una mujer de Timnat (filistea) llevando desgracia a su familia. Participó de una fiesta de bebidas alcohólicas y también se contaminó tocando el cuerpo de un animal muerto. En Gaza vuelve a fornicar con una mujer ramera cuando la Torá explícitamente prohibía la fornicación y, en especial, con mujeres extranjeras. Y nuevamente se enamora de Dalila, otra mujer filistea que vivía en el valle de Sorec, pero de allí ya no pasó.

Es muy evidente observar en Sansón una actitud de indiferencia y menosprecio por hacer la voluntad de Dios y por obedecer a Su Palabra. Desobedecer a la voluntad de Dios y desdeñar la Ley significa elegir deliberadamente el camino hacia el fracaso.

Sansón se desvío del propósito de Dios unos cuantos grados hacia donde le dirigían los designios de su corazón, y terminó en Gaza como un cazador cazado, fue a Filistea por lana y regresó trasquilado, permaneció en la cárcel atado a un molino haciendo las tareas de un esclavo y/o de las mujeres, sin ojos y siendo el escarnio de sus enemigos, a quienes se suponía que debía combatir y vencer (Jueces 16:21,23).

La vida de Sansón nos enseña que el éxito en la vida no consiste en poseer dones y talentos extraordinarios, sino en obedecer a la Palabra de Dios y hacer su voluntad.

-Carlos H. Suárez

Plan de lectura de la Biblia completa en un año:

Febrero 11, 2019
Levítico 6-7
Mateo 25:31-26:5