Youtube

LEGADO HISTÓRICO


LEGADO HISTÓRICO

«No les ocultaremos estas verdades a nuestros hijos; a la próxima generación le contaremos de las gloriosas obras del Señor, de su poder y de sus imponentes maravillas» (Sal 78:4 NTV).

El Salmo 78 fue escrito por el poeta Asaf. Está dirigido al pueblo de Israel en general y a los líderes (gobernantes y padres) en particular. El salmo contiene la filosofía de la historia del pueblo de Dios, y el salmista la utiliza como una parábola para enseñar las lecciones más importantes que Dios les ha compartido en el pasado. En la historia se encuentra la narrativa de las gloriosas obras del Señor: los magníficos relatos de su poder y las historias de sus imponentes maravillas.

Es fundamental que cada generación conozca la historia de la relación de Dios con su pueblo, para que cada generación vuelva a confiar en Dios, ponga en Él su esperanza y no olvide sus gloriosos milagros. De esta manera, obedecerán sus mandamientos y serán prosperados. Al conocer la historia, los hijos tendrán menos posibilidades de ser obstinados, rebeldes e infieles al Señor, como los antepasados de Israel, quienes se negaron a entregar su corazón a Dios.

Carl Henry, el famoso teólogo estadounidense, advirtió sobre la gran responsabilidad de los padres de enseñar regular y diligentemente la historia bíblica a sus hijos, y del peligro de no hacerlo: «Un hijo que se pierde de la fe, generalmente se convierte en una familia perdida de la fe, y no muchas generaciones después, se levanta toda una comunidad de incrédulos a consecuencia de una negligencia anterior de deberes paternales». Dios se ha revelado por medio de la historia y esta es un recurso didáctico para enseñar el carácter de Dios a su pueblo.

El pueblo que menosprecia su historia desconoce su identidad y sus valores, y también corre el riesgo de repetir sus errores. La iglesia del Señor necesita conocer al Dios que la llamó de las tinieblas a la luz admirable, para entender la misión de dar a conocer la grandeza de su amor y su salvación a todo el mundo.

Carlos Humberto Suárez Filtrín

No hay comentarios

Con la tecnología de Blogger.